Amanece un nuevo día.
En un 29 de diciembre de 2.010, hace 45 años, un servidor vió la primera luz del día de su vida. También, el día anterior, dejó de ver la luz quien me dió la mitad de mi vida y de la que siempre le estaré eternamente agradecido.
Lamentáblemente, todos los días, mientras unos empiezan a ver la luz... otros la dejan de ver (aunque nunca se sabe si se podrá ver esa 'otra luz' después de abandonar el mundo terrenal). La vida es así y hay que aceptarlo.
Una persona muy especial me dijo un día, que una de las cosas que más le gustaba era ver amanecer, aunque a mi me gustase más los atardeceres (por aquello de no madrugar para poder ver el sol de frente).
Poco a poco voy aficionándome a ver amaneceres y, éste que veis, es un amanecer muy especial.
Gracias por enseñarme, entre otras muchas cosas, a ver tantas cosas ocultas a los ojos de los demás.
